Fiestas del Noveno 2013
Enviado por M. C. en 12 mayo, 2013 – 21:459 Comentarios
SAN FELICES DE LOS GALLEGOS
Así lo anunciaba este domingo en contra de la voluntad del benefactor, que pretendía escapar del populismo, el alcalde de la localidad, Jesús Bernardo Gajate, momentos antes de que el alcalde de Ahigal de los Aceiteros, Ángel Pino Ayuso, en compañía del alcalde de Puerto Seguro, Evaristo Montero Álvarez, diera lectura de la histórica Real Sentencia de 1852 tras la homilía en la iglesia de Nuestra Señora de los Álamos, tal y como acordaron los alcaldes de sendos municipios hace más de siglo y medio.
La noticia era recibida con aplausos, primero en la iglesia y más tarde en la plaza, donde los vecinos corearon el nombre del sacerdote hasta que lo hicieron saltar sobre el balcón del Ayuntamiento, acompañado también de los diputados provinciales de Turismo, y de Ferias, Antonio Gómez Bueno y Jesús María Ortiz. En el anuncio de la donación, el alcalde sanfeliceño hizo saber, también por los altavoces, las condiciones impuestas por el benefactor, y que consisten en que el castillo pase a ser patrimonio de los vecinos de forma perpetua, dejando establecido la prohibición de su venta y que su aprovechamiento sirva para difundir la historia y cultura de la villa medieval.
Desarrollo de los festejos populares
Pero antes de este esperado y emotivo momento, tenía lugar el segundo encierro de las fiestas del Noveno, festejo que discurrió sin incidencias, aunque no por ello exento de algún que otro susto, el más destacado tenía lugar en la avenida principal del pueblo, donde un joven caía delante de las astados, pero que pudo incorporarse antes de que fuera arrollado por la manada.
Con un cierto retraso respecto a lo anunciado, los caballistas se hacían con la manada de mansos y bravos en una parcela cercana al casco urbano del municipio, donde los astados de la ganadería de José Tomás García García 'Joseto' han permanecido durante los últimos días.
Sobre las 11.30 horas comenzaban en la calle las primeras carreras de los aficionados, lo que dejaba intuir la proximidad de la manada de cinco novillos y otros tantos mansos. La entrada al pueblo se producía con la manada agrupada, aunque los escasos metros uno de los de 'Joseto' despuntaba de sus hermanos aproximándose al vallado del recorrido, lo que originó cierto peligro en el recorrido urbano hasta la entrada a la plaza, que se produjo, finalmente, sin incidencias.
Con los astados ya en chiqueros se procedía a la misa y lectura de la Real Sentencia, momento en el que los vecinos conocían la buena nueva. Concluidos los actos oficiales tendría lugar un encierro urbano con dos novillos, además de la 'probadilla', festejo que daría paso ya en la tarde a la actuación del novillero de La Fuente de San Esteban, Alejandro Marcos, y a la posterior capea y desencierro de los astados, que pondría fin a unas fiestas históricas del Noveno en San Felices de los Gallegos.
- El propietario del castillo, el sacerdote Francisco de Dios, dona el monumento al pueblo
- Varios miles de personas abarrotaron las calles para asistir a los últimos festejos taurinos
Sin lugar a dudas, el 12 de mayo de 2013 pasará a la historia del pueblo de San Felices de los Gallegos. Antes lo hicieron días próximos a esta fecha y en virtud de lo cual desde hace 161 años se rememora en esta villa la Real Sentencia de 1852 por la que sus vecinos quedaban liberados del pago de un noveno de sus frutos a la casa de Alba, que en concepto de señorío jurisdiccional y vasallaje estaban sujetos junto a los de Ahigal de los Aceiteros y Barba del Puerco (Puerto Seguro).
Y es que el propietario del castillo de San Felices de los Gallegos, y sacerdote natural de esta localidad, Francisco de Dios Manchado, ha decidido cumplir la voluntad de su padre y donar al pueblo sanfeliceño el castillo medieval que corona esta villa, una decisión que ha llegado a sus 91 años de edad y después de que su salud se haya resentido tras el accidente de tráfico que sufría hace unas semanas.Así lo anunciaba este domingo en contra de la voluntad del benefactor, que pretendía escapar del populismo, el alcalde de la localidad, Jesús Bernardo Gajate, momentos antes de que el alcalde de Ahigal de los Aceiteros, Ángel Pino Ayuso, en compañía del alcalde de Puerto Seguro, Evaristo Montero Álvarez, diera lectura de la histórica Real Sentencia de 1852 tras la homilía en la iglesia de Nuestra Señora de los Álamos, tal y como acordaron los alcaldes de sendos municipios hace más de siglo y medio.La noticia era recibida con aplausos, primero en la iglesia y más tarde en la plaza, donde los vecinos corearon el nombre del sacerdote hasta que lo hicieron saltar sobre el balcón del Ayuntamiento, acompañado también de los diputados provinciales de Turismo, y de Ferias, Antonio Gómez Bueno y Jesús María Ortiz. En el anuncio de la donación, el alcalde sanfeliceño hizo saber, también por los altavoces, las condiciones impuestas por el benefactor, y que consisten en que el castillo pase a ser patrimonio de los vecinos de forma perpetua, dejando establecido la prohibición de su venta y que su aprovechamiento sirva para difundir la historia y cultura de la villa medieval.Desarrollo de los festejos populares
Pero antes de este esperado y emotivo momento, tenía lugar el segundo encierro de las fiestas del Noveno, festejo que discurrió sin incidencias, aunque no por ello exento de algún que otro susto, el más destacado tenía lugar en la avenida principal del pueblo, donde un joven caía delante de las astados, pero que pudo incorporarse antes de que fuera arrollado por la manada.Con un cierto retraso respecto a lo anunciado, los caballistas se hacían con la manada de mansos y bravos en una parcela cercana al casco urbano del municipio, donde los astados de la ganadería de José Tomás García García 'Joseto' han permanecido durante los últimos días.
Sobre las 11.30 horas comenzaban en la calle las primeras carreras de los aficionados, lo que dejaba intuir la proximidad de la manada de cinco novillos y otros tantos mansos. La entrada al pueblo se producía con la manada agrupada, aunque los escasos metros uno de los de 'Joseto' despuntaba de sus hermanos aproximándose al vallado del recorrido, lo que originó cierto peligro en el recorrido urbano hasta la entrada a la plaza, que se produjo, finalmente, sin incidencias.Con los astados ya en chiqueros se procedía a la misa y lectura de la Real Sentencia, momento en el que los vecinos conocían la buena nueva. Concluidos los actos oficiales tendría lugar un encierro urbano con dos novillos, además de la 'probadilla', festejo que daría paso ya en la tarde a la actuación del novillero de La Fuente de San Esteban, Alejandro Marcos, y a la posterior capea y desencierro de los astados, que pondría fin a unas fiestas históricas del Noveno en San Felices de los Gallegos.
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